domingo, 11 de diciembre de 2011

LA FUENTE LA FERRADA


Cuando nos dirigimos hacia Ceadea, aproximadamente a un kilometro y medio de Lober nos encontramos un arroyo entre verdes pardos donde crecen frondosos sauces y chopos, allí en un descampado nos encontramos con una fuente de aproximadamente un metro cuadrado.  Es  la Fuente la Ferrada, de ella, sale abundante agua con un sabor a hierro, la cual, parece estar tibia en invierno y  fría en verano, lo que hacía en tiempos, que la gente que en verano pasaba por el lugar se detuviera para beber amorarandose  a ella un trago para aliviar el cansancio de una larga velada de siega o arada. Sitio también donde se paraban pastores y vaqueros donde podían mojar en la fuente un trozo de pan duro, el cual aunque mojado en agua perdía por completo el sabor a pan, era la única manera de poder masticar el pan por unas dentaduras deterioradas  mayormente por  el  poco  mantenimiento .

 Se cree que en ella se lavaba  el mineral de las antiguas minas de hierro, al encontrarse por la zona restos de piedras de color negro procedentes de las minas. Son tres minas, se encuentran  subiendo arroyo arriba, a  pocos metros de la fuente, están situadas al margen izquierdo del arroyo a unos 200 metros de distancia unas de otras, estas minas pueden tener como unos 80 metros de longitud. No se sabe con exactitud, pero se cree que fueron explotadas por los años 1800, el mineral era transportado con carros y bueyes hasta Zamora, siendo desde allí transportado por otros medios a Avilés donde era fundido para convertirse en hierro. Según comentarios se dice que estas minas se cerraron por que el  transportista que transportaba el mineral a Zamora, en el transporte reventó varias parejas de bueyes, y al no poder continuar con el transporte, la empresa explotadora de las minas tuvo que cerrar.  Aún se puede ver por el entorno de las minas algún montón de mineral abandonado al no poder ser transportado.

Hasta hace poco, estas minas abastecían de agua a unos aljibes, de los cuales durante años re regaron fértiles hueras donde se criaba todo tipo de productos hortícolas, siendo los pimientos   alubias y patatas los productos que ese tipo de tierra mejor  criaba. Desde hace unos años comenzó a escasear el agua,  siendo este, y la despoblación los  únicos problemas que hacen que en la actualidad esas huertas se encuentran en estado de abandono total.
En la actualidad en estas minas albergan  una importante colonia de murciélagos, los cuales permanecen colgados en el interior oscuro esperando que llegue la noche para salir revoloteando  para atrapar insectos.
Hasta hace poco la Fuente la Ferrada abastecía de agua a tres pozas arroyo abajo, en estas pozas se acumulaba el agua que corría de la fuente, y que después se aprovechaba para regar la denominada Huerta. La Huerta está compuesta por pequeños latifundios, en la que prácticamente todos los vecinos del pueblo de Lober poseen una de estas pequeñas propiedades  Llamadas “Linares” los cuales hasta principios de los años 70 eran destinados a sembrar lino y frejoles de  palo.

Dichas pozas y albañales eran limpiadas cada año por los propietarios de las fincas, y el agua era repartida por cada finca a razón de 12 horas, correspondiendo regar a unos por la mañana y a otros por la tarde. Cuando a un vecino le sobraba agua por disponer de poco terreno para regar, el agua sobrante podía ser  aprovechada  por otro vecino que previamente la había pedido y era cedida como favor.

Hoy esta Huerta, igual que prácticamente todo el demás terreno de regadío o de secano permanece en  un total abandono  fruto de la emigración  hacia las ciudades  industrializadas de la mayor parte de la población en los años 60 y 70, dando lugar a un total envejecimiento de la población  hasta el punto de hoy quedar paralizada la agricultura en su totalidad..

Si la fuente la Ferrada
manara vino.
la campana grande
sería el cuartillo.
Gúmaro,  11  de Diciembre de 2011

2 comentarios:

  1. Como siempre, quiero que sepas que me gustado tu historia y que me ha traido buenos recuerdos. Yo acompañé muchas veces a mis abuelos a regar aquellas huertas. Allí solía comer una planta que no recuerdo su nombre, somilar a un trebol. De hecho, yo les llamaba tréboles.

    Mundos Azules (Salva)

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  2. Ahora me haces dudar Salva. Dado que me crié entre la hierba, siempre me he considerado un un conocedor de ella, pero ahora estoy dudando a que tipo de hierba te refieres. Recuerdo comer unas hierbas que las llamábamos pata de gallina, era una hierba pequeña y alargada que por ambos lados de la hoja hacía como picos de sierra. Había otra planta que echa carnizuelos, una especie de hoja redonda y robusta aunque pequeña. Estas hierbas se solían criar en sitios con poco cuerpo de tierra, más bien en las teteras y sitios fallisqueros, y salia entre mayo y junio.

    Gúmaro

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