miércoles, 25 de febrero de 2009

EL CONCEJO

El concejo es también una de tantas cosas perdidas en las pueblos de Aliste en nuestros días, y por la ausencia de este vemos como los caminos se quedan intransitables por falta de tránsito, por falta de arreglos ect, ect.
Eran varios días al año en que el Alcalde Pedáneo reunía a los vecinos para ir de concejo, el día de “Antruejo” y el día de “Jueves Santo” eran ya por tradición dos días de concejo, a parte durante el año había otros muchos días que si el Acalde lo consideraba oportuno reunía los vecinos para hacer cumplir esta misión.

PAGAR LA ENTRADA DE VECINO.

Cuando un hombre se casaba, para tener derecho a las cosas comunes del pueblo, como eran, Quiñones de leña, Quiñones de labranza, así como para tener derecho a poder pastorear con sus haciendas por los sitios comunales, era imprescindible estar dado de alta como vecino en su pueblo de residencia. Para eso era necesario pagar lo estipulado por las normas de cada pueblo, pero que más o menos, por todos los pueblos de Aliste, las normas eran parecidas. En mi pueblo, Lober, para poder ser vecino el requisito imprescindible era en un día de Concejo, pagar, vino suficiente para todos los vecinos, escabeche y aceitunas negras, para hacer una merienda todos juntos por la tarde a la hora que se acaba el Concejo.

EL TOQUE AL CONCEJO.

Para llamar los vecinos al concejo, se hacía con un toque de campana. Normalmente el día anterior por la noche al tiempo de oscurecer el Alcalde daba una señal, que era tocar la campana grande varias campanadas sin intervalos, con este toque los vecinos quedaban avisados que el día siguiente deberían tener el día libre para lo que el Alcalde ordenara. Por la mañana siguiente alrededor de las ocho de la mañana, otro toque de la misma característica pero al final del toque se añadían tres campanadas sueltas, las cuales confirmaban que debían personarse los vecinos en la plaza de la Iglesia, donde el Alcalde pasaba lista, y posteriormente daba la orden del trabajo comunal que tenía previsto hacer. Al toque al Concejo debían asistir todos los vecinos, y si por las circunstancias que fueran alguno no podía asistir, debía pedir permiso al Alcalde, y este lo concedía si era por una falta justificada, pero siempre le quedaba pendiente una “gera” que este vecino debía devolver al pueblo en día que de común acuerdo se acordara. Una vez leída la orden por el Alcalde y avisados los vecinos de las herramientas que debían ir provistos, se podían marchar a almorzar, para luego una hora más tarde, el Alcalde daba el toque definitivo, y los vecinos se debían personar en el sitio de trabajo acordado donde otra vez se pasaba lista.

TRABAJOS MAS SE HACÍAN DE CONCEJO.

Las tareas que más se hacían de concejo era arreglar caminos, para este trabajo a veces era necesario un carro o más con la correspondiente pareja de vacas, para transportar relleno de tierras o grabas para el relleno de baches. La limpieza de zarzas de las callejas estrechas en el “pago” de las callejas de la Huerta, el Arroyo Baldelmayo, y la Rivera, hoy en día todas ellas en difícil acceso por las zarzas y arbustos que han crecido. Partir las “eras”que se solía hacer el día de Santiago, y luego se echaban a suertes. Hacer “Quiñones” de leña, y “Quiñones para arar, limpiar fuentes, bebederos, pozas de riego comunales y albañales. Limpieza de valles como el “Campetón” y “Baldelmayo” entre otros, esparciendo la “muñicas” y limpieza de regaderas para el riego en primavera.

ALCALDE PEDANEO.

Casi por lo general en Aliste al ser pedanías pequeñas el Ayuntamiento está compuesto por varios pueblos, el caso de mi pueblo, Lober, el Ayuntamiento está en Gallegos del Río, el cual está compuesto por siete pueblos. Cada pueblo tiene su Alcalde pedáneo independientemente del Ayuntamiento, el cual es nombrado a dedo por el Alcalde Presidente, siendo acompañan dos” regidores” nombrados por el, cuya misión de estos es ayudar al Alcalde Pedáneo a vigilar los sitios comunes del pueblo acotados para el pasto, y vigilar las rayas de los pueblos colindantes, para que las haciendas de no traspasen la demarcación de estos, si así lo hicieran, los ganaderos prendados por los regidores, deberán pagar al pueblo la correspondiente multa impuesta por el Alcalde Pedáneo. Si se negaran a ello, el cobro de estas multas lo pasarían al Ayuntamiento, siendo después este el encargado de cobrarlas por vía de apremio.

25 de Febrero de 2009.

Gumaro.

lunes, 2 de febrero de 2009

LAS CABAÑUELAS

De siempre se ha conocido que de una manera u otra ha habido diferentes maneras de predecir el tiempo. Según leyendas los pastores siempre fueron pioneros, con sus observaciones en la dirección de los vientos, el color de las nubes, la presencia de aves migratorias, oír más o menos claras las campanas de algunos pueblos, y como no, tampoco podían faltar numerosos refranes dedicados a la meteorología. En Lober se decía, que si las campanas de Gallegos del Río o de Flores se oían claras, era señal de tiempo claro y seco, en cambio , si se oían claras las campanas de Mellanes, seña que a los pocos días llovía. Estos son algunos de los refranes que yo oí siempre a los más viejos que conocí en Lober, y que tenían reacción con la meteorología:

Duero claro y sierra oscura, agua segura.

Si la abeja ves beber, mu pronto veras llover.

Si la sierra se pone la capa, no dejes la tuya en casa.

Cielo aborregau, a los tres días mojau.

Enero hiela el agua en el caldero.

Si llueve en la luna nueva de octubre, agua para todo el invierno.

Los pastores, siempre pendientes de la meteorología, eran los más entendidos en cuanto a la predicción meteorológica, y alguno de estos descubrió las “Cabañuelas” que junto con el calendario zaragozano fueron los únicos argumentos que los alistanos se regían hasta que por los años 60 llegaron a los pueblos de Aliste las primeras radios de las que escuchaban el parte con el correspondiente pronóstico meteorológico recibido del satélite Meteosat.

Las cabañuelas, recuerdo por poco contar a los más viejos del pueblo, cuando decían: Hoy es la cabañuela de tal o cual mes, y siempre puse interés en preguntar a alguno de ellos que me enseñara, pensando que eso con el tiempo se perdería, pocos sabrían después explicarnos tal manera de predecir el tiempo.

Mi madre, era una de las que las sabía contar por haberlas oído a los más viejos, aunque ella, decía, nunca se acordaba de contarlas cuando era la época.

Las cabañuelas, como su propio nombre indica, provienen de “cabaña”, de ahí se dice que fueran pensadas por un pastor. Unas “ andan” y otras “desandan.”

Las que “andan” comienzan el día de Santa Lucia 13 de diciembre, y acaban el día de noche buena 24 de diciembre ambos inclusive, correspondiendo así un día a cada mes. Por ejemplo: El día 13 de diciembre sería la de enero, el día 14 sería la de febrero y así sucesivamente hasta acabar los meses. Dependiendo el día que haga la cabañuela, dependerá el tiempo el mes que le corresponda.

Las que “desandan” comienzan el día 26 de diciembre y acaban el día 6 de enero, estas van alrevés,el día 26 sería la de diciembre, e día 27 la de noviembre, y así sucesivamente hasta agotar los meses, pero siempre el tiempo con el mismo método que las anteriores.

Como parece lógico pensar no siempre coinciden las que "andan" con las que "desandan" y por eso tradicionalmente decían que son más fiables las que van hacia atrás.

1 de enero de 2009. Gumaro